El próximo encuentro con la historia podría ser el ya mencionado antes Campo de Plaszów, no muy lejos del centro de Cracovia. No es muy frequente visitarlo, aunque es una de las excursiones en Cracovia que vale la pena hacer.

Monumento en Plaszow - foto Jacques Lahitte
Monumento en Plaszow – foto Jacques Lahitte

Originalmente fue un campo de trabajos forzados construidos por los alemanes sobre el terreno ocupado por dos cementerios judíos, sin respetar la particulariedad del lugar. En el año 1943 los nazi convertieron el sitio en un campo de concentración y exterminio, para aniquilar principalmente los judíos de Cracovia.

El campo en Plaszów se ha hecho conocer por muchas atrocidades que se cometieron allá, especialmente los cometidos por el comandante, un sádico capitán de SS, Amon Göth, historia conocida también gracias a la pelicula «La Lista de Schindler». El 13 de marzo de 1943 Göth fue quien supervisó personalmente la liquidación del Gueto de Cracovia, ordenando asesinar en aquel momento todos los judíos que no eran aptos para trabajar en el campo en Plaszów, matando él personalmente a gran número de mujeres y niños.

Amon Göth fue más sádico y cruel de lo común entre los oficiales nazis, lo llamaban «el verdugo de Plaszów». Según los testimonios de los sobrevivientes, cada mañana empezaba su día disparando desde el balcón de su casa a algien al azar sin importarle si eran niños, mujeres o ancianos. Solía disparar cuando veía que algun preso se movía – según él – lento o a los que estaban descansando un momento en el patio; entrenó sus perros para atacar a su orden y desgarran a los presos. Poldek Pfefferberg, uno de los sobrevivientes de Plaszów, dijo: «Cuando veías a Göth, veías a la muerte».

Según los archivos que los nazi no lograron distruir, por el Campo pasaron alrededor de 150 mil prisioneros, de los cuales apenas 2 mil sobrevivieron la guerra. El destino principal de los judíos de Cracovia que lograron conservar la vida en Plaszów fue Campo de exterminio en Auschwitz. De los 2 mil sobrevivientes, más de un mil son las personas de la «lista de Schindler».

El Campo en Plaszów fue totalmente destruido por los alemanes al ver las tropas rusas acercándose a Cracovia. En el último momento los nazi exhumaron miles de cadáveres para quemarlos y borrar las huellas; acto seguido asesinaron los prisioneros encargados de la exhumación. Un día antes de aparecer las tropas soviéticas en Plaszów, los últimos presos fueron enviados a campo en Auschwitz.
El campo en Plaszów nunca fue reconstruido, quedan solo las ruinas de los edificios que antes formaban parte del Campo, y algunos postes de la valla eléctrica que rodaeba el lugar. No es una atracción turística típica de la ciudad, parece ser un parque, sin embargo es un lugar muy importante en su historia, y la historia de la humanidad. Entrando en el espacio del antiguo campo de concentracion Plaszów hay paneles informativos que piden respeto debido al lugar donde tantos perdieron su vida. Uno puede visitarlo en soledad y tener su propio encuentro con la historia. Allá, en las colinas de Plaszów se encuentra uno de los monumentos a las víctimas de nazismo más espectaculares en Europa; construido en año 1960, llamado «los corazones rasgados».